Las pymes están siendo muy bien vistas en varios países del mundo para repuntar las finanzas en sus regiones. Los gobernantes de España están al tanto de esto y saben que son de vital importancia para obtener la estabilización económica que buscan. La financiación externa que utilizan las pequeñas y medianas empresas en la actualidad, es solamente para el pago a proveedores y empleados y las cancelaciones de las deudas existentes.
En el segundo trimestre se redujo notoriamente el número de firmas que acudió a estas ayudas. Esto significa que hay una mejoría en el rubro, ya que no tienen la necesidad imperante de solicitar dinero para saldar problemas.
Los recursos monetarios corren por bolsillo de los mismos empresarios y eso es algo que le da mucha satisfacción a las autoridades nacionales. Antes, lo más tradicional era que para poder crecer o evitar inconvenientes se recurra a créditos. En el presente esto sucede en menor proporción y es una buena señal de cara al futuro de todas las pymes del país.
La Cámara de Comercio elaboró una encuesta por medio de la cual la mayor parte de las firmas lucenses no ha tenido que buscar financiación en el mes de abril y junio. Esto tiene que ser muy tenido en cuenta ya que la cifra fue cercana al 72,3 por ciento.
El otro 27,7% de las empresas que sí lo hicieron, sólo el 36,6% tienen la mente puesta en que la situación se ha puesto más dura y que es muy difícil de sobrellevar, mientras que el 30,6% se mostraron muy satisfechos ya que alegaron que no tuvieron ningún conflicto en el acceso a la financiación.
Los sitios adonde suelen ir las pequeñas y medianas empresas cuando están en apuros financieros son los bancos y las cajas de ahorro, que por el momento tienen un trabajo inferior al que se registró en 2009.
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